© Natalia Alonso
© Natalia Alonso

Carola Ortiz es … ecléctica: peculiares versiones pop-jazz con su dúo Minimal Hits, sonidos de los Balcanes con Moussakis, armonías vocales con la orquesta de percusión ibérica Coetus, composiciones originales con diferentes influencias en AxisOrca, cantando clásicos del jazz con Jp Balcazar Trio, y numerosas otras formas… el hilo común parece ser un proceso de exploración y síntesis sin descanso con una visión musical muy personal.

1. Cuál fué tu primer instrumento musical y qué significó para tí?
No hace tanto tiempo atrás, mi niñera me contó que la primera vez que me vió tenía 2 años y estaba sentada en mi orinal cantando ‘El Virolai’ (una canción religiosa que habla de la Virgen de Montserrat). Como se puede ver en esta foto, que tomó mi padre hace muchos años, estoy sentada en su contrabajo gigante. Estos fueron mis primeros instrumentos junto a mi pequeño xilófono. IMG_20150924_182506 (1)Aparentemente estaba destinada a ser cantante y tener varios duos con contrabajistas, el primero de todos con mi padre y el último con Jp Balcázar, que de hecho toca el xilófono en nuestro set de Minimal Hits. No existen las casualidades!

2. Quién ha sido la persona con la que has colaborado que más te ha inspirado?
Creo que aparece otra vez mi padre. Lo recuerdo haciendo solos de ‘scat’ des de que tengo uso de razón. Es un artista multidisciplinar extremadamente creativo, a parte de ser músico de jazz activo, también es un increíble pintor de arte abstracto, dibujante (puede hacer un retrato a lápiz que parece como una fotografía), es fotógrafo (en linaje de mi abuelo que se ganó la vida con la fotografía) y también es investigador científico. Es completamente autodidácta en todas sus facetas. No le gusta ir al médico y se cura a si mismo con remedios naturales, comida sana y saliendo a la naturaleza. También es una persona muy sensible y a veces puede estar muy triste… Puedes imaginarte que tener un padre así es algo de muy inspirador! Y somos extremadamente parecidos en muchos aspectos. Él me ha ayudado mucho a tener fe en mi intuición, en la música y en la vida (también mi increíble madre!). Seguramente, tener una infancia y unos padres tan diversificados artísticamente es el porqué me siento cómoda en los varios contextos musicales, escenas, lenguajes y culturas en las que me he movido y el porqué me atraen tantas expresiones artísticas diferentes. Un hecho divertido que tengo muy presente es cuando un día mi padre, al contarle que quería ser un músico profesional, me dijo que tenía que estudiar mucho, tocar con los mejores músicos y haber triunfado antes de los 30. Esto me creó mucha presión pero también mucha fuerza y hoy en día estoy contenta con mi carrera musical, aunque siempre sigo mirando adelante, hacia todo lo que aún me queda por hacer. Tampoco me gustan los médicos convencionales y siempre intento curarme, incluso a otras personas, con mi intuición, remedios naturales, el movimiento… Me alimento de comida muy sana y practico yoga, meditación y varios tipos de terapias holísticas/alternativas.

3. Cuál es el punto de partida de una composición?
La gente que quiero, una separación, los sueños, el agua, un paisaje, la luna, la noche, las flores y su perfume, los viajes, NY, el shamanismo, Björk, Joni Mitchell, y todos los grupos en los que toco y los increíbles músicos con los que he tocado. Las mejores canciones me vienen cuando voy andando relajadamente, o tarde por la noche y en la ducha! Algunas melodias aparecen muy espontáneamente y tengo la sensación que ya las había escuchado antes, que no son mías… Al final el arte es eso, una canalización de algo ‘universal’.

4. Cuál es el balance entre preparación-improvisación en los conciertos o grabaciones?

Depende totalmente de la banda en la que toco. En Coetus, por ejemplo, mi rol es cantar con harmonias vocales casi todo el tiempo, pues está muy pautado. En otras bandas, hay más espacio a la improvisación o incluso, improvisación total. Pero mi preferencia es el punto medio, cuándo puedo ‘interpretar’ una canción y hago una impro melódica con el clarinete; así, cada vez con la misma canción, la diferencia es muy sutil y esa depende de la emoción con la que conectas en ese preciso instante, entonces me sorprendo a mi misma y es cuándo se me pone la piel de gallina!

5. Has pasado un tiempo en Nueva York recientemente. Qué piensas de la escena musical allí, comparada con la de Barcelona?
Siempre quiero hacer de Barcelona, más un NY cuándo vuelvo… La última vez, volví de la gran manzana con mucha energía, quería hacer un festival en Barcelona con varias bandas, danza, pintura, video con interacciones entre ellas con impros, live painting, video mapping… Tengo todos los amigos artistas para hacerlo pero a nivel práctico empezé a encontrarme con un montón de dificultades y me bajé del carro… Vine con este sueño porqué una semana antes, al principio de 2015 en NYC, con mi amiga Naomi Jean, organizamos dos conciertos con varios artistas increíbles. Tuvimos a la bailarina japonesa Hitomi Nozawa; a John King, guitarrista y viola, improvisador y compositor que trabajó con John Cage 10 años; Albert Marquès, un pianista catalán instalado en la escena jazzística de NY y Brandon Lewis, un bateria que lanzaba bases y grooves de trip-hop-world-electronic. El segundo día también tuvimos a Kenny Woellesen, percusionista de John Zorn y Bill Frisell; Takuya Nakamura y Doug Wieselman, increíbles musicos y arreglistas de CocoRosie entre otras cosas, e incluso un descendiente griot de Mali, Yacouba Sissoko. Todos estos musicos increíbles en la misma sala, la misma noche! Aquéllas dos noches fueron increíbles… mágicas. Y acontecieron en Spectrum y Nublu, ambos en el Lower East Side.

L-R: Albert Marquès, Carola Ortiz, Naomi Jean, Brandon Lewis, Hitomi Nazawa, John King.
I-D: Albert Marquès, Carola Ortiz, Naomi Jean, Brandon Lewis, Hitomi Nazawa, John King.

En NY, la mayoría de artistas, independientemente de su carrera o su fama, se interesan mucho por cuál es tu sonido, no te preguntan por tus experiencias pasadas, y quieren hacer arte y música por el simple hecho de enriquecerse, experimentar e inspirarse con conexiones y material nuevo, fresco. La ciudad apoya naturalmente este tipo de encuentros ofreciendo espacios increíblemente equipados, dónde encontrarse y tocar. Creo que esto es esencial para crear una escena, una nueva manera de hacer música… Me identifico totalmente con la escena del Lower East Side y de NY en general. Siento que allí está el nuevo underground, la música del futuro. En Barcelona es todo muy distinto, hay muchísimos músicos con talento pero la ciudad no nos ofrece suficientes espacios dónde encontrarnos, enseñar y compartir este arte en toda su extensión y posibilidad. Incluso, si algunas cosas están cambiando para mejor, los músicos en general se dividen en grupos pequeños de escenas, clubs, estilos musicales y no hay realmente una conexión entre ellos ni existen programadores que lo faciliten. Los únicos que hace un poco este trabajo en Barcelona son los del Festival LEM y del Festival de Jazz de Vic, que des de la crisis, están teniendo muchos problemas por sobrevivir…

6. Dónde te sitúas en el debate streaming/downloading/file-sharing/músicos no siendo pagados por su música?
Es muy muy triste todo esto… Creo que programas como Spotify (y yo lo uso a veces) o los de bajada gratis o Youtube han cambiado completamente el mercado musical y han generalizado la consumición de la música, rebajando el valor ‘económico’ a nuestro trabajo y las horas que le dedicamos a ser buenos profesionales. Ahora el foco está en buscar la popularidad y la fama a través de esos medios. Al menos, el punto bueno es que cualquier música puede llegar a cualquier parte del mundo. Otro punto es que la mayoría de medios oficiales en España distorsionan muchísimo el criterio de lo que es la buena música y no muestran todo lo está pasando de realmente interesante en nuestro país. Un primer gran cambio seria, siguiendo el modelo francés, tener una cadena de televisión pública como Arte, por ejemplo.

7. Si el dinero y el tiempo no importaran, cuál sería tu próximo proyecto?
Haría un viaje a la India, Méjico y el Amazonas. Viviria entre Paris, NY, Buenos Aries, DF… tocando y grabando discos de musica experimental, jazz, folklore, electrónica… Haría un largometraje surrealista, con una fotografía trabajadísima, dónde también actuaría y haría la banda sonora. A la larga, me gustaría ser terapeuta también… Soñar en nuevos proyectos no es un problema para mí, quizás tengo demasiados, pero algunos de ellos ya se han cumplido, y esto funciona para todos. Tendríamos que estar más enfocados a nuestros sueños y como dicen, ojo con lo que sueñes que se hará realidad!.

[traducido por Carola Ortiz]

Un preestreno do uno de los proyectos próximos de Carola, un dúo con Edurne Arizu:

Minimal Hits “Ramona” es disponible en Spotify; y albumes por AxisOrca están en Bandcamp.

carolaortiz.com